El reino aislado y ermitaño de la RPDC se esconde en secreto. Es casi imposible obtener información confiable detrás de la cortina de bambú. No obstante, cada semana, en televisión y en línea, somos bombardeados por el espectáculo mediático extraño de Corea del Norte. Desde el apocalipsis nuclear y los campos de prisioneros hasta el sarcasmo prohibido y los cortes de pelo idénticos obligatorios, cualquier fragmento de información sobre Corea del Norte se convierte en un éxito mediático viral, independientemente de cuán dudosa sea la historia.
Pero eso está a punto de cambiar.
Dos chicos australianos decidieron tomar el asunto en sus propias manos e ir a Corea del Norte para descubrir la verdad por sí mismos. Únase a nosotros mientras miramos más allá del clickbait y desempaquetamos las fuerzas detrás de la forma en que nuestros medios representan a la “República Popular Democrática de Corea del Norte”.